El viaje para lanzar el Anillo Único al Monte del Destino resultó ciertamente peligroso, pero las imágenes entre bastidores de El Señor de los Anillos muestran que el rodaje también tuvo sus propios peligros. Numerosos miembros del reparto sufrieron dolorosos cortes y huesos rotos durante el rodaje en Nueva Zelanda, pero su actitud de reírse y seguir adelante demuestra la dedicación de todos a las películas.
Los DVD y las descargas digitales de El Señor de los Anillos suelen venir con horas de material entre bastidores que es tan entretenido como las propias películas. Demuestra que la trilogía fue un trabajo de amor para todos los que trabajaron en ella, lo que se refleja en el producto final. Desde ver a los actores Viggo Mortensen, Orlando Bloom y John Rhys-Davis corriendo por las colinas, hasta el actor de Gollum Andy Serkis chapoteando en un río de rocas, está claro que las actuaciones fueron lo primero.
Una de las primeras lesiones se produjo cerca del final de El Señor de los Anillos: La Comunidad del Anillo, cuando el actor Sean Astin, de Samwise Gamgee, se precipita al lago después de que Frodo comience a navegar. Como se ve en el corte, Astin se adentra en el lago y pisa un gran trozo de cristal que le atraviesa el pie. El reparto y el equipo se reúnen a su alrededor mientras sacan el fragmento y, aunque Astin se hace el remolón, la herida sangra tanto que tienen que llamar a un helicóptero para que lo lleve al hospital.
El rodaje de El Señor de los Anillos: Las dos torres parece haber sido el que más lesiones ha provocado al actor de Aragorn, Mortensen. Uno de los fragmentos más populares de la película es durante la escena en la que Aragorn encuentra una pila de cuerpos de orcos en llamas, suponiendo que Merry y Pippin están entre ellos. El director Peter Jackson hizo que Mortensen pateara un casco y gritara de rabia varias veces, y en la última toma, Mortensen pateó el casco con tanta fuerza que se rompió un dedo del pie, lo que dio lugar a un grito tan bueno que la toma llegó a la película. Mortensen también tuvo una experiencia cercana a la muerte durante el rodaje de una escena en la que flota en un río. Quedó atrapado en una corriente entre un acantilado y se sumergió bajo el agua durante un largo periodo de tiempo, lo que provocó el pánico entre el equipo.
Aunque hubo muchas lesiones graves, hay algunas con las que el reparto disfruta bromeando. Por ejemplo, el actor de Legolas, Bloom, se cayó de un caballo y acabó con una costilla rota. Aunque al principio se ganó la simpatía, todos sus compañeros de reparto se burlan de lo mucho que se quejó Bloom del dolor durante semanas. Y la misma reacción tuvo el actor de Merry, Dominic Monaghan, mientras corría junto a Bucklebury Ferry, ya que gritó de dolor sólo para descubrir que había pisado una pequeña astilla.
Aunque el rodaje puede haber sido duro para algunos actores, es fascinante observar su nivel de dedicación a la trilogía de El Señor de los Anillos, que definitivamente se percibe en las tres queridas películas.